martes, 25 de marzo de 2014

Revalorizando y/o juzgando a Suárez: de la devoción a la condena.


Ha muerto Suárez. Lo sabe todo el mundo, como repetían los Dothrakis de la saga de "Canción de Hielo y Fuego" (¿es necesario que cite al autor?). Los medios de comunicación oficiales emiten las imágenes de sus homenajes, así como de los momentos principales de su vida, y los debates televisivos lo colman de elogios. Las instituciones revalorizan su nombre al máximo cual libertador latinoamericano, tratándolo casi como un "padre de la patria". Se le nombra portador de la democracia y luchador incansable contra el franquismo, incluso, como dijo esta tarde Mamen Mendizábal, "sigue derrotando a Franco aun estando muerto", ya que algunos ayuntamientos están sustituyendo nombres de calles dedicadas al Generalísimo o a otros personajes franquistas por el nombre del mismo Suárez. Incluso el aeropuerto de Barajas ha pasado a llamarse "Aeropuerto Adolfo Suárez - Madrid Barajas". Esa es una cara de la moneda.

La otra es la de las redes sociales y los de los medios de comunicación alternativos, diametralmente opuesta. Éstos medios analizan la figura de Suárez en clave de personaje eminentemente post-franquista, como persona deseosa de ostentar cargos de poder, como un reformista que consiguió "colarnos" una transición que fue una farsa. Vemos como de un medio a otro se pasa de considerar a Suárez el gran cruzado contra el franquismo y el padre de la democracia a considerarlo el gran estafador, el que logró que las élites franquistas quedaran, ya no solo impunes, sino perfectamente integradas en el nuevo sistema político que surgió de sus reformas.

¿Demócrata o tecnócrata? ¿Transformador o reformista? ¿Renovador o regenerador? Parece que uno sólo puede situarse en una posición o en la contraria. Da la sensación de que o se le adora o se le odia. Y algunos no nos sentimos identificados con ninguna de las dos posiciones (como pasa con muchos otros temas). Ni tanto ni tan poco, señores. Un servidor no es nada amigo de los términos medios (es más, los detesto), pero en este caso ambas posiciones sobre Suárez son esencialmente erróneas. Comparto con las lectoras y lectores mi propia valoración de Suárez, si no se han cansado ya de tanto leer sobre él y no tienen ya aborrecido hasta la saciedad su nombre.

La figura de Suárez, para empezar, debe juzgarse tan sólo dentro del contexto en el cual vivió, contexto, como sabemos, nada fácil. Yo no viví la transición, y muchos de los que estamos hoy aquí o directamente no la vivimos o fueron demasiado jóvenes como para valorarla. La opinión de muchas y muchos se debe única y exclusivamente a lo que han oído de bocas de padres y abuelos, a conversaciones de sobremesa y de café, y a menudo se trata simplemente de opiniones pasionales y poco contrastadas. Pero lo cierto es que fue una época muy complicada.
En las calles se oía ruido de sables, se estaba viviendo un extremismo ideológico similar al de los años 30. Los fascistas de aquella época no eran los de hoy en día, que dan risa y bastante pena. Aquellos daban verdadero miedo. Eran tiempos de sargentos chusqueros y de individuos con gafas oscuras, traje negro y bigote. Una transición pacífica verdaderamente era una utopía, y todo estaba "atado y bien atado" para continuar con el régimen. Muchos dirán que, efectivamente, todo estaba bajo control, y por eso vivimos en una pseudodemocracia postfranquista en la cual no se ha producido una ruptura real con la sociología de la dictadura. Y tendrán mucha razón, pero una cosa no quita la otra. La cuestión está en CÓMO debía estar todo atado y bien atado.

Muchos se olvidan de que la transición, con toda la estafa que supuso y la impunidad descarada de los crímenes franquistas contra la humanidad, podría haber sido mucho peor. Y no peor a nivel de desorden social y de revuelta (que también), sino peor a nivel de aún menos reformista.
Podría, perfectamente, haberse creado una especie de Estado integral electivo, una democracia muy tutelada reducida a un partido único con una comparsa de partidos minoritarios sin poder real de tumbarlo, con derechos sociales muy limitados, sindicato único dirigido por la patronal, y con leyes conservadoras y vinculación estatal directa a la Iglesia. Podría haberse creado, perfectamente, un Irán católico, y seguramente a la mayoría de la población ibérica de aquellos momentos le habría parecido bien. Y a la comunidad internacional le hubiese parecido aún más que bien. La transición podría haber sido aún más estafa de lo que fue.

Lo cierto es que muchos no nos queremos dar cuenta de que los cambios que impulsó la figura de Suárez fueron claves en aquella época. Eran los cambios adecuados en aquel contexto y en aquellas circunstancias. Una sociedad ibérica domesticada, con sectores muy crispados, que podría haber sufrido una estafa peor. Lo que debe criticarse es el continuismo posterior.
Porque aquel régimen reformado de finales de los 70, perfectamente adecuado para las circunstancias de finales de los 70 y principios de los 80, ya no es adecuado para la situación actual. Es ahora que es necesario dar un paso adelante, y ser valiente. Es ahora que es necesario reivindicar la República, que hay que luchar por los derechos sociales, que hay que acabar con el aparato político corrupto partitocrático. Y debe conocerse el pasado y aprender de los errores. Es muy cierto que todas estas reivindicaciones podrían haberse hecho mucho antes, me atrevería a decir que desde mediados-finales de los 90, pero en el momento en que el régimen post-franquista pseudodemocrático nacido de la Transición ha durado tanto y ha gozado de tanta aceptación, debemos hacer catarsis y pensar que quizás estaba mejor hecho de lo que nos pensamos.

Ciertamente nuestra sociedad ha evolucionado. Ahora está preparada para un cambio verdaderamente democrático. Iberia está preparada para la democracia. Pero, ciertamente, sin las reformas del señor Suárez, difícilmente lo estaría.

No se piensen los lectores que voy a obviar las sombras del personaje. Cierto es que era pura ambición de poder. Se dice que en una ocasión afirmó: "daría la mitad de mi vida por tener durante un sólo día el mismo poder que él" (refiriéndose al agonizante Franco), cita que obviamente no podemos contrastar, pero que es perfectamente creíble. Se dice que ya en la universidad repartía tarjetas en las que se definía como futuro presidente del gobierno. Ascendió posiciones en el aparato político franquista sin ser un nacional-católico convencido, por pura ambición de poder. Y lo logró, llegó a presidente, y además con un partido etéreo que sin él pasó a la historia. Quien realmente desea algo es capaz de conseguirlo, dicen. Pero eso no quita de que sus reformas hicieran mucho bien a nuestra sociedad, aunque fueran intencionadamente más que insuficientes.

Suárez, ¿héroe o estafador? Pues, ahora mismo, difunto, al cual presento mis respetos como a cualquier otra persona fallecida. Pero, a la vez, figura clave de la historia reciente, a la que es necesario recordar y de la que mucho se puede aprender.



Ahora, debe construirse el futuro. Deshacer a Suárez para crear la democracia. Es necesario luchar por la democracia, por la república, y por el poder popular.



ECG.

domingo, 23 de marzo de 2014

Marchas por la dignidad y el poder popular.


Imágenes de Madrid ayer al atardecer.
La afluencia superó por mucho las
espectativas de las entidades organizadoras.
Un éxito. No existe otra forma de definir lo que pasó ayer. Se superaron las expectativas de afluencia, y se logró la mayor manifestación de la historia de la "democracia" (si al régimen en el que vivimos se le puede llamar así).

De todos los rincones de Iberia llegó gente de diversas ideologías, de diversas sensibilidades, con acentos e idiomas diferentes, pero una sola voz. Reclamando lo que es nuestro: nuestros derechos, los cuales se creen los de la clase política que son ellos quienes nos los dan o nos los quitan, cuando lo único que hacen es aceptarlos o negarlos. Porque nadie nos los tiene que dar, ya son nuestros. La clase política corrupta tiene el deber y la obligación moral de aceptar nuestros derechos, y actuar en consecuencia.


Ni la intervención de los antidisturbios al final de los actos, cuando todavía las voces de los niños cantando se oían sobre el escenario de los actos de la celebración, han podido empañar la velada. Como todo el mundo se esperaba, intervinieron sin previa provocación y justo cuando empezaban los informativos. El cuento de siempre: a tratar
los manifestantes de antisistema y de radicales que pretenden ocasionar daños materiales. Pero, pese a que decía Goebbels, por mucho que se repita una mentira no acaba nunca por convertirse en verdad. La verdad siempre acaba saliendo, y las fuerzas del estado no la tienen de su lado. Y lo saben.

Se dice a menudo que los pueblos ibéricos estamos aborregados, que discutimos mucho en los bares pero no hacemos nada en la calle, que sabemos mucho de fútbol pero no tenemos cultura política, que nos dejamos llevar por el bipartidismo, que los nacionalismos, sean del bando que sea, nos ciegan y nos hacen obviar otras cuestiones mucho más esenciales. Y tal vez esto mayoritariamente halla sido así, pero las cosas están cambiando. 

Miles de banderas desfilaban juntas ayer. Desde estel·ladas a tricolores, de Ikurriñas a banderas andalucistas, de rojinegras a banderas rojas, de estandartes de sindicatos y partidos mayoritarios a banderas de partidos y sindicatos alternativos. Muchos símbolos, muchas ideas diferentes, algunas de ellas totalmente incompatibles entre sí, pero no importaba. El espíritu del Frente Popular vuelve a volar sobre nuestras cabezas, y el acuerdo de mínimos para derrocar a la oligarquía que nos gobierna disfrazada de democracia empieza a verse como factible. En Cataluña, el movimiento independentista cada vez está más lejos de Artur Mas y de CiU, y quiere tender la mano a sus hermanos del resto de pueblos ibéricos. En andalucía el SAT sigue marcando la diferencia y mostrando que los cambios son posibles. En Euskadi ya no les pueden acusar de que ETA está detrás de todo (pese a que siguen haciéndolo), y ahora saben que pueden llegar los cambios de verdad. Y un largo etcétera.

Para el PP, era todo una colección de nazis. Pretenden equiparar esta gran masa de movimientos heterogéneos con Amanecer Dorado y otras agrupaciones de ultraderecha en Europa. Patético. Cada vez que intervienen provocan sonoras carcajadas, y a la vez verdadera preocupación ante la disyuntiva de si nos toman el pelo, o verdaderamente se creen las sandeces que dicen. Ciertamente, no se cual de las dos opciones da más miedo.

Pero ahora deben callarse y reflexionar. El Pueblo cada vez está más unido, y dice las cosas claramente. Muchos dicen que el 15-M fueron cuatro perroflautas y que aquello ya se acabó, pero su espíritu sigue muy vivo en diversas formas, y estas formas siguen materializándose.

Porque no nos dejaremos engañar, y esto no acaba de comenzar. Ya está ocurriendo. Y está muy maduro.

Al frente, la bandera legítima
de la democracia y el pueblo.
Al fondo, la bandera impuesta.
Y ahora, Gobierno oligarca pseudodemocrático, ¿escucharás la voz de tu pueblo? ¿O volverás a ignorarlo una vez más, confiando en la minoría cada vez más escuálida que te dio los votos, pensando que es cuestión de tiempo que las cosas mejoren y que el pueblo se calme? Porque por mucho que repitas que estamos saliendo de la crisis y que las cosas mejorarán, ya hace tiempo que no nos lo tragamos. Y cuanto más lo repitáis, será menos verdad, o al menos nos lo creeremos menos (recordad el cuento de Pedro y el lobo).

¡Poder popular!



ECG.

martes, 18 de marzo de 2014

Crimea, Vèneto, Escòcia, Catalunya: Una comparativa


L'any 2014 ha arribat carregat de sorpreses "inesperades". En menys d'un mes, a Ucraïna té lloc un aixecament popular nacionalista i europeísta (Euromaidan) que tomba el govern pro-rus triat prèviament per la majoria russòfona del país, fet que provoca una ocupació de la regió autònoma pro-russa de Crimea per part de les forces de Putin, i setmana i mitja després veiem com se celebra un referèndum que permet als crimeus decidir què volen ser. I han triat ser russos. I per si això no fos suficient, paral·lelament està tinguent lloc al Vèneto un referèndum on-line a on triaran entre diverses opcions per als venecians, entre elles la seva independència, però a més a més també votaràn la seva pertanyença o no a organismes com la UE o la OTAN, i altres qüestions. I per si tot això no fos suficient, està programat per al 18 de setembre un referèndum a on els escocesos decidiran si volen que la seva nació constituent del Regne Unit passi a ser una república independent o no, i, suposadament (però encara sense capacitat de confirmar-ho), s'ha de celebrar també el 9 de novembre un referèndum similar a Catalunya. Però la pregunta és, podem establir paral·lelismes entre aquests processos? Les circunstàncies són semblants? Estem davant d'una nova "primavera dels pobles" com la de 1848? O estem devant d'una desintegració del bloc europeu occidental com la que va viure el bloc oriental a finals dels anys 80?

Certament és difícil per a qui viu fora dels Estats involucrats en els conflictes haver seguit fins a data d'avui aquests processos, però que si un busca una mica a les xarxes i als mitjans de comunicació en podrà trobar referències que es remonten molts i molts anys enrere. I un podrà entendre millor què està passant. I certament, és inevitable mirar de buscar similituts i, fins i tot, intentar establir dinàmiques. Però més enllà de les circunstàncies particulars de cada un dels territoris esmentats, molt i molt diferents, m'agradaria incidir en un factor que, a priori, veig com a molt més determinant: a on es vol arribar amb aquests processos, és a dir, què es busca després de la independència (o no) d'aquests territoris?

Comencem amb Crimea. El seu estatus inicial era la d'una república autònoma amb un cert autogovern, i la seva demografia diferia elementalment amb la de la major part d'Ucraïna amb la presència aplastantment majoritària de russòfons en el territori, a més de la presència de la minoria tàrtara. Històricament Crimea havia estat tàrtara, i després va ser colonitzada per Rússia. Des de llavores Crimea sempre havia estat russa, però una decissió poc encertada del líder soviètic Kruischev va entregar la península a la RSS d'Ucraïna, la qual es va independitzar convertint-se en la Ucraïna actual que tots coneixem. Des d'aquesta independència, Ucraïna ha patit una intromissió constant de Rússia en els seus assumptes, així com una dependència energètica odiosa, fet que va portar a la Revolució Taronja del 2004-05 proeuropeísta, que n'és el precedent directe de l'Euromaidan del 2014. Però aquesta darrera revolució a priori europeísta ha degenerat cap a postures ultra-nacionalistes molt excloents, fet que ha portat finalment al referèndum sobre l'estatus polític de Crimea. I no sabem de moment com acabarà la situació, ja que Ucraïna ha decidit mobilitzar els seus reservistes, i es respira un clima de guerra. Certament, Putin ha fet una jugada molt astuta, però alhora ha tingut molta sort, ja que tot plegat ha coincidit amb què USA es troba reduïnt les seves forces armades a nivells anteriors a la Segona Guerra Mundial, i Europa es troba enmig d'una campanya electoral europea decisiva, a on molts sectors volen veure canvis profunds dins de la UE. Ha pillat a occident amb el cul a l'aire, i veig difícil que ningú pugui impedir que el poble crimeu torni a ser rus.

I què passa amb el Vèneto? Aquí veiem un procés que forma part d'un altre que ja ve d'abans: el president de la regió és Luca Zaia, pertanyent a la Lliga Nord, facció de dretes identitària que demana l'autodeterminació de les regions industrials del nord d'Itàlia, considerant que el sud d'Itàlia és un pou sense fons de subvencions i ajudes públiques, improductiu, que els hi impedeix desenvolupar-se plenament. El debat sobre la organització territorial de la República d'Itàlia ve des de la pròpia reunificació italiana, la qual en un principi volia veure una Itàlia federal (plantejament lògic tenint en compte les importantíssimes diferències físiques, culturals i econòmiques entre els territoris constituents de l'Estat Italià), però aquesta mai s'ha vist realitzada. Veiem una Itàlia de tendències centralistes, amb diverses concessions envers determinades regions, les quals sovint veuen un "efecte yo-yó" amb els seus drets depenent de l'època. Però la caiguda del govern tecnòcrata imposat per la UE a Itàlia i la pujada al poder de Matteo Renzi, un centralista confès, ha portat a que el govern venecià decideixi tirar endavant un referèndum que durarà 5 dies: del 16 al 21 de març. 

Luca Zaia
El propi Zaia ha extès la mà cap a Catalunya, comparant ambdues situacions. Personalment, no sento cap mena de simpatia envers la Lliga Nord, ja que els seus plantejament els veig més propers a Plataforma per Catalunya que no pas a CiU. Però no és menys cert que la situació al Vèneto és semblant a la catalana: zona autònoma d'un Estat pseudodescentralitzat, hereva d'una gran potència mediterrània medieval, amb llengua pròpia, i un govern de dretes que esgrimeix arguments econòmics per tal de legitimar el seu procés. Les zones sud dels respectius Estats espanyol i italià són vistes com a endarrerides i com a eternes mantingudes per mitjà dels impostos, i els governs burgesos venecià i català fan promeses de prosperitat si s'aconsegueix la secessió.

I què passa amb Escòcia? La seva situació m'atreviria a dir que és la més diferent de totes, quasi privilegiada si la comparem amb les altres tres. Escòcia, en realitat, no ha deixat mai de ser una nació pròpiament dita. Ténen les seves pròpies federacions esportives, veuen les seves seleccions competir en les grans competicions internacionals, i tenen control sobre la seva educació. Escòcia és quasi un Estat sobirà, que comparteix una mateixa monarquia amb els anglesos, galesos i nord-irlandesos. No existeix una constitució única per a tota la monarquia, per lo que no hi ha cap impediment legal que des de Westminster es pugui esgrimir contra la voluntat del parlament escocès de proclamar la seva secessió si el poble ho dessitja. Així doncs, Escòcia és qui a priori ho hauria de tenir més fàcil, però els debats sobre la sobirania del petroli, així com sobre si s'entrarà a l'Euro o es mantindrà la lliura esterlina, així com els sondeijos que donen una victòria al "no" en el referèndum, estàn fent que el procés que a priori és el més coherent estigui esdevinguent el més complex.

Però una vegada més, a on es vol arribar amb tot això? Bé, els crimeus des del principi han deixat clar que ells volien ser russos, i han tirat pel dret amb l'ajut de les tropes russes en molt poc temps. Els escocesos no tenen gens clar si volen seguir sent britànics o no, ja que escocesos ja ho són. Al Vèneto tenen clar que volen ser venecians, però el debat està en quin Vèneto volen. I les seves autoritats n'estan actuant en conseqüència: estan preguntant al poble venecià si volen ser italians o no, si volen ser europeus o no, si volen ser occidentals o no. Però el govern català no té cap intenció per mitjà del referèndum de plantejar al poble català QUINA Catalunya vol. Suposadament ens preguntaran si volem que Catalunya sigui un Estat o no, i en cas afirmatiu, si volem que aquest sigui independent. Però no ens aclareixen fins a on arribarà aquesta independència: només de l'Estat espanyol? O també de la UE? O del FMI? o de la OTAN?

Se'ns ven des del govern català que és només l'Estat Espanyol qui ens té sotmesos, quan en realitat el propi govern espanyol es troba més sotmès encara que la pròpia Catalunya. Una Catalunya independent que no controli la seva moneda i segueixi depenent de Brusel·les i del FMI, és veritablement independent? Doncs és molt obvi que no.

La resposta a tot plegat és molt senzilla: els poders fàctics catalans, encarnats pel pacte d'Estat CiU-ERC, no volen cap mena de canvi real a Catalunya. Simplement, volen que canvii tot, per a que no canvii res. Per això tots els debats sobre què hi haurà després de la independència es posterguen, s'ajornen. Ja és omnipresent l'argument simplista i pueril de "primer la independència, després ja parlarem". Els què esgrimeixen aquest argument crec que no tenen gaire clar que els debats sobre quin model de país s'ha de tenir s'han de fer ABANS de crear el país, i no després de què aquest ja ha estat construït. Que potser un decideix quin tipus d'armari vol després d'haver-lo montat? No, oi? Un primer decideix què vol comprar, i després ho compra i ho construeix. Però el govern català està intentant colar als catalans i catalanes una enorme estafa piramidal, i el poble se n'adonarà després d'haver-la comprat. I després serà molt més difícil canviar-ho tot.

Per això, el poble català ha d'exigir ja no només que se li pregunti si vol que Catalunya sigui un Estat o no. El poble català ha de decidir COM ha de ser aquest Estat. I per aconseguir-ho, primer ha d'adonar-se'n de què els celebradors del referèndum, de moment, no ens ho volen preguntar.



ECG.

viernes, 14 de marzo de 2014

Torna el blog: "Danzad, danzad malditos"


Un servidor ha intentat durant la major part d'aquests darrers mesos, sense èxit, guardar silenci (més que res per tal de garantir la salut mental de les i els internautes), però certament els PePero-noCiUs (lo de peperovergents ja cansava) m'ho estàn posant extremadament difícil.  Sí, senyores i senyors. Torno a estar extremadament indignat. I he decidit tornar a escriure

Com a introducció, i per al públic lector que no estigui al cas, contextualitzo amb què la història de la meva indignació va començar amb la coneguda i polèmica compra del fons Santos Torroella. Sí, senyores i senyors... El nostre estimat govern municipal, que nega de forma sistemàtica tota mena de proposta que s'aparti dels seus projectes (si és que en tenen), ens va colar doblada fa un meset escàs una "reforma-expréss" de l'edifici de l'antiga audiència provincial de davant de la catedral, i per decorar-ho tot plegat, compra aquesta col·lecció d'obres d'art. 


Edifici del 'antiga audiència provincial
La indignació es va generalitzar. La forma com ho va gestionar tot el senyor alcalde feia vergonya. Si volia colar aquesta col·lecció de quadres, hi ha mil sistemes ja inventats de demagògia i de populisme que poden permetre "colar" la cosa i mantenir la opinió pública contenta. Es pot començar promocionant la reforma de l'edifici com a part d'un impuls econòmic i cultural per a la ciutat, i després, quan aquesta reforma sigui ben popular per a tots i totes, anunciar que s'inaugurarà el nou espai cultural de la ciutat amb les obres del fons Santos Torroella (que es poden haver adquirit disimuladament una mica abans). I tothom "content". Només ens queixariem els de sempre, i la resta de la gent diria que ens queixem per vici, que "a picar pedra ens posarien ells". 


Les abstencions de Veray (PP) i
Bonaventura (R.cat) van ser claus
per a fer que el vot de qualitat
de l'alcalde permetès la compra
del fons Santos Torroella
Però no. No podia haver-se fet pitjor. El penúltim ple, un ple molt crispat i amb moltes novetats (entre elles, el nombre de regidors d'esquerres es va reduïr de 5 a 4), va haver de menjar-se una nova manifestació de la PAH a la seva porta, havia de veure com uns pocs ciutadans i ciutadanes compromesos volien entrar en el ple a comprobar com s'intentava aprobar la impopular mesura del fons Santos Torroella... I no ho van poder fer. Com si de goril·les de discoteca es tractéssin, van situar una línia de policies locals fent barrera a la porta de l'ajuntament anunciant que "la sala de plens estava plena", i que no es podia passar. Estrany, perquè una persona s'havia deixat la jaqueta reservant un lloc a dins, però ja se sap que en la política sempre tenen lloc fenómens molt estranys (com la casual caiguda al terra i trencament de femur del senyor Millet just abans del seu judici). I quina casualitat també, es va tornar a permetre el pas al ple quan la moció sobre el fons Santos Torroella s'acabava d'aprobar...


L'alcalde va entrar en còl·lera, i va haver d'utilitzar (una vegada més) el seu vot de qualitat per poder portar-nos aquesta "meravella cultural" a la ciutat. La seva indignació es va basar en la defensa de la cultura de la ciutat, i altres perles vàries. Però aquí no va acabar la cosa, i el següent ple va venir calentet una vegada més.


Una altra idea de bomber va sorgir al diaris i a les converses de café, ara més nombroses, perquè a més dels jubilats, ara també hi participen els aturats. Ni més ni menys que cobrir el riu Güell per a construir-hi a sobre un vial. I aquí sí que van jugar amb foc, perquè han anat a tocar un dels símbols del "nacionalisme eugenienc", que tot i que pot semblar que està mort, a la que el toquen, reneix. I van menjar-se una reacció, vaja si se la van menjar! I una vegada més, un ple crispat, en el qual van haver de renunciar-hi per força al projecte.

I atenció, que ara arribem al moment actual. Ara resulta que el nostre govern municipal està ofès perquè la oposició "no li permet tirar endavant les seves polítiques", que li està fent una mena de boikot. Segons ells, la ciutat s'està tornant ingovernable.


Aquí és on arriba la disjuntiva a on un no sap què li fa més por: que ens estiguin prenent el pèl, o que veritablement es pensin que ho estan fent bé. Si realment creuen que tenen un projecte de CiUtat que és del gust de la ciutadania, i de què és la malvada oposició amb quatre perroflautes al darrera qui ho està arruinant tot, doncs certament "hay para alquilar sillas".



Després de lo del fons Santos Torroella, es parlava d'un "Gamonal" a la ciutat. Ara ha sorgit la polèmica dels rius, i moltes altres més. Reneixen vells "nacionalismes" locals, que semblaven soterrats: primer Sant Narcís, després Sant Daniel, ara Santa Eugènia (i tot coincidint amb que l'any passat van cumplir-se 50 anys de la seva annexió unilateral a la ciutat). I encara no s'ha refredat la qüestió dels serveis funeraris (amb la concessió amb Mèmora renovada per tres anyets més), molt viva des de finals de l'any passat, i encara hi ha coses per destapar.

I pot portar molta cua, perquè els serveis funeraris són només la punxa d'un enorme iceberg, que són els serveis municipals externalitzats. Perquè s'està veient amb aquests serveis (el cas més extrem el d'aigües de Girona) estan patint un seriòs risc d'impagaments en el futur per part del govern municipal, i podem trobar-nos en un futur no gaire llunyà amb què aquests serveis senzillament deixin de prestar-se. A l'estil de les ciutats de llatinoamèrica, amb tallades de llum i d'aigua en determinades zones, o coses pitjors. Hi ha qui m'acusarà d'alarmista, o, com sempre, de demagog (a més d'un se li hauria d'ensenyar què vol dir realment la paraula "demagògia", que ara està molt de moda), però qui avisa no és traidor.


I sí, senyores i senyors... Torno a escriure. Alguns (pocs) ho celebraràn, altres (uns pocs més) s'emprenyaràn, i molts, moltíssims, milers, els hi donarà exactament igual.


Però, com a mínim, tornarem a fer emprenyar una mica més al personal...


ECG.