sábado, 30 de marzo de 2013

Retorno a los 50, vuelve la Guerra Fría


El "amado líder" nordkoreano ha declarado el Estado de Guerra una vez más, 60 años después de la tregua que llevó a la Guerra de Korea a un punto muerto. No le es suficiente con cambiar las reglas del baloncesto a su antojo, sino que como si de sus propios juguetes se tratara mobiliza a sus fuerzas intentando dar miedo a los yankees, cuando en realidad sólo está respondiendo a una provocación muy clara.

No sé si en el Pentágono se creen muy listos, o simplemente son idiotas. Como dijo Konstantín Asmólov esta mañana, el hecho de enviar cazabombarderos a sobrevolar los cielos de la República Popular de Korea obedece a una intención de demostrar que el régimen de Pyongyang no es tan fuerte como dice ser, y que no tiene capacidad suficiente de respuesta frente a un ataque militar aéreo de Washington. Además, de esta forma pretenden amedrentar a Rusia y a China. Muy tranquilo me dejan... Los Nordkoreanos realmente no pueden putear a nadie más que no sean Korea del Sur o Japón, en cambio Rusia y China pueden putear a medio planeta en cuestión de segundos.

Me gustaría saber cómo reaccionarían los medios si ahora a Rusia o a China se les ocurriera la feliz idea de sobrevolar Miami con MIGs. Pero claro, parece que últimamente a los americanos se les perdona todo. Como Obama es negro y es muy majo... Y se les olvida que no todo depende de Obama, y que aunque tengamos mucho que aprender de América en lo que a democracia participativa se refiere, lo cierto es que su política exterior no tiene defensa alguna. Además, están confirmando lo que ya es un hecho: el neoliberalismo yankee está agonizando, y USA está sufriendo las consecuencias de su modelo caduco, que depende en gran parte de la explotación del tercer mundo. Pero el tercer mundo se les está rebotando, y las bases de su opulencia se les derrumban. Ahora todos los economistas dicen que el futuro está en manos de los BRICs (Brasil, Rusia, India, China), que son las nuevas potencias emergentes, y parece que los americanos no van a digerir tan bien dejar de ser primera potencia, como ya tuvieron que hacer en su momento los ingleses, los franceses, los alemanes o los españoles...

Desde luego que es el más grave error posible pensar que sacando músculo se van a frenar las aspiraciones de las nuevas potencias emergentes ultranacionalistas. Lo cierto es que da mucho miedo a occidente pensar que en un futuro no muy lejano los chinos y los hindús quieran vivir como occidente, y ahora vienen los discursitos de que "el planeta no puede aguantar físicamente un nivel de vida tan alto para tanta gente". Prefiero ni opinar al respecto, menuda hipocresía...

Los 50 vuelven a estar de actualidad, y no en moda o en música, sino en política. Los mecanismos de la Guerra Fría vuelven, pero ahora los actores principales no son sólo dos. Ahora sólo podemos confiar en que la residenta surkoreana, Park Geun-hye, sepa manejar diplomáticamente la situación, y evite que corra la sangre una vez más en la península de Korea. Pero ciertamente, no sé de quién me fío menos, si del gordito feliz, o de la presidenta conservadora...

Pero a pesar de todo, quienes deben arreglar el problema de korea deben ser los koreanos, y no los americanos, ni los rusos, ni los chinos.

ECG.

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